EL ACCESO DE ARMILLAS
TENEMOS LA COLECCIÓN MÁS AMPLIA Y RICA EN BACHES DE LA PROVINCIA

En 5,5 kilómetros los tenemos de todo tipo, colores y formas, hay 40 puntos con baches y 12 zonas que solo es posible pasarlas en primera marcha y frenando. Tenemos baches y verdaderos barrancos para regalar, por todo el camino, en horizontal, vertical, diagonal, en línea o por separado, grandes y pequeños, visibles y escondidos, de tierra y con todo tipos de piedras.
El acceso al pueblo de Armillas desde la carretera A222, que utilizamos todos los vecinos desde hace más de 50 años, es un camino de tierra, y también es utilizado por los vehículos de todo tipos de administraciones e instituciones: forestales, basuras, bomberos, medio ambiente, ambulancias, también el comercio, oficios y servicios etc.
Hasta hace unos 7 u 8 años la Diputación Provincial de Teruel lo ponía a punto en primavera cada año o cada dos años, de forma puntual y sin problemas. Desde hace ya estos 7 años nadie quiere arreglarlo. Las lluvias torrenciales del último otoño y primavera lo han convertido, en muchos tramos, en un verdadero barranco de montaña.
Tenemos que recordar, para tener una dimensión correcta de los daños que sufrimos, que las torrenciales lluvias que en otoño arrasaron las localidades de Montalbán y La Hoz de la Vieja, procedían en buena parte de las montañas de Armillas, pero no se nos quiso incluir por el gobierno de Aragón o por la Diputación, entre las localidades afectadas.
Se puede traer a colación ese cuadro del pintor Magritte “Esto no es una pipa” con el que pretendía llamar la atención sobre las diferencias entre la imagen y el objeto, entre la realidad y la representación que hacemos de ella. Pues queremos denunciar que “Esto no es un camino”, ni una carretera, ni un acceso al pueblo, no es verdad ni la imagen ni el objeto.
Dónde está Armillas, existe, no será una falsa noticia de internet, de las redes ?. Armillas no somos los últimos de Teruel, estamos detrás del último, es decir “no estamos” ni se nos espera, nunca, jamás, para nada. Perdón sí se acuerdan de nosotros, para extraer miles de toneladas de caolín sin dejarnos un céntimo en el pueblo, o para ponernos placas solares y molinos de viento que dejarán sus beneficios en tierras muy, pero que muy lejanas, o para venir a cazar desde no se sabe dónde, o cuando algún deportista se pierde o busca tierras escondidas. Pero si alguien se deja caer por estos andurriales, que venga preparado y no espere conectarse por teléfono.
Yo me pregunto, ¿igual estamos confundidos y no somos Teruel?. ¿Al servicio de quién están las Administraciones Públicas, los beneficios y riquezas que aporta el territorio, cuales son las prioridades?. Porque llevamos muchos años oyendo que la llegada de las energías renovables nos resolverán los problemas del acceso y de las comunicaciones, y no se cuantos otros problemas más; y que algunos vecinos podrán forrarse de dinero, que todos viviremos mejor (el cuento de la lechera parece insignificante). Pero la verdad, la realidad, es tozuda, nunca llega este paraíso. Y por otro lado, sospechosamente, nadie nos responde, nadie nos quiere decir cuánto nos costará todo ello de verdad. Todos sabemos que estas cosas nunca son gratis y el silencio siempre es no solo sospechoso, sino también culpable.
Hasta que el cielo venga a nosotros, Armillas sigue purgando un día en el infierno, y otro en el purgatorio, esperando la justicia divina, ya que nuestro reino, nuestro pueblo, no es de este mundo.






