Cientos de turolenses y visitantes han acompañado la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno en su procesión por las calles más angostas de Teruel en absoluto silencio. La imagen, portada a hombros por los cofrades, ha terminado su recorrido por la calle Amantes, ya de camino a la plaza del Seminario de donde, pasados algunos minutos de las doce de la noche, salía hacía la Andaquilla.
El olor a incienso y el sonido ahogado de los tambores también iban acompañando la procesión en una noche algo fría.
Pasadas ya la una de la madrugada, la procesión ha llegado a la plaza del Seminario donde se ha roto el silencio.