La consejera de Educación, Cultura y Deporte, María Victoria Broto, ha visitado la catedral de Teruel, donde ha conocido los trabajos de restauración que se están llevando a cabo en la capilla de la Inmaculada.
Esta capilla fue fundada entre los años 1730 y 1740, en estilo barroco. En 2009, el Gobierno de Aragón suscribió un convenio de colaboración con Caja Inmaculada para la restauración de este lugar. El proyecto contemplaba la restauración integral de la capilla, es decir, yeserías, retablo, lienzos, reja e iluminación, además de catas para comprobar si existía decoración subyacente bajo la pintura de las yeserías.
Estas catas dejaron a la luz las pinturas originales de la capilla, que actualmente te están recuperando. Dichas pinturas consistía en motivos figurativos en los elementos de la cúpula y policromía en todos los elementos de las yeserías, y aparecían sólo con algunas pérdidas puntuales en alguna zona de los plementos.
Además, al desmontar el ángel que cerraba el remate de la cúpula se descubrió la linterna de la capilla con toda su decoración de yeserías original y los ventanales cerrados con unos vidrios en mal estado de conservación.
Tras los descubrimientos se decidió aumentar los trabajos de restauración para eliminar todas las capas de pintura que cubrían la decoración de la cúpula para recuperar la original y restaurar el interior de la linterna, cerrando los ventanales con placas de alabastro. Los trabajos de recuperación de la decoración pictórica han consistido en la eliminación de las diferentes capas de pintura que la cubrían, la limpieza de la decoración descubierta, la consolidación de los estratos pictóricos y la reintegración de color.
El importe de estos trabajos, cuya finalización esta prevista para otoño, ha estado en torno a los 450.000 euros.
