Según nos cuentan desde la Benemérita,Sobre las 09:20 horas del día 15 de noviembre, una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico del Destacamento de Teruel procedió al control de un vehículo de la tercera categoría que transportaba una carga de 11.000 Kg, cuando se encontraba circulando a la altura del P.K. 134 de la autovía A-23, término municipal de Cella (TE).
El conductor realizó una maniobra errática invadiendo el arcén, lo que motivó la alerta de los agentes que circulaban tras él.
Al llegar a su altura, observaron cómo el conductor circulaba sin hacer uso del cinturón de seguridad y consumiendo una cerveza mientras conducía. Tras ser conducido el vehículo fuera de la circulación a un lugar seguro, el conductor fue sometido a las pruebas de detección alcohólica, arrojando una tasa positiva de alcoholemia de 0,48 mg/l en aire espirado. Cabe recordar que la tasa máxima permitida de alcohol para conductores profesionales es de 0,15 mg/l, por lo que, en este caso, la tasa arrojada por el conductor superaba el triple de lo permitido.
Por los citados hechos, se procedió a la inmovilización del vehículo y se instruyeron las correspondientes diligencias judiciales al conductor, vecino de Portugal y de 50 años de edad, por el Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de Teruel, siendo puesto el mismo a disposición de la Autoridad judicial en calidad de investigado como supuesto autor de un delito contra la Seguridad Vial.
El pasado día 13 de noviembre de 2023, se estableció un Dispositivo Operativo de Seguridad Vial en la autovía A-23, dentro del término municipal de La Puebla de Valverde (TE), dispositivo incluido entre los que se realizan periódicamente en la provincia de Teruel por el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, junto a otras Unidades de la Comandancia de Teruel.
En la realización del citado dispositivo se procedió al control del conductor de un turismo, al cual y, tras realizar las pertinentes comprobaciones de su documentación, se pudo confirmar que circulaba con una pérdida de vigencia del permiso de conducir, pérdida decretada por la Jefatura Provincial de Tráfico de Teruel por carencia de puntos. Además, el conductor arrojó una tasa positiva de alcoholemia de 0,74 y 0,70 mlgs/litro de aire espirado y el mismo conductor también arrojó un resultado positivo en consumo de sustancias estupefacientes. Por tales hechos, el conductor fue investigado por los delitos indicados y, a su vez, también fue denunciado por conducir con presencia de drogas en el organismo.
Por la comisión del delito contra la seguridad vial (por conducir teniendo una pérdida de la vigencia del permiso por carecer de los puntos asignados), el conductor investigado se puede enfrentar a las penas prisión de 3 a 6 meses o a una multa de 12 a 24 meses o a la realización de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.
Por la comisión del delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas o con una tasa de alcoholemia que supera las tasas reglamentariamente establecidas (0,60 mlgs/l litro de aire espirado), el conductor investigado también se puede enfrentar a penas de prisión de 3 a 6 meses, o multa de 6 a 12 meses o a trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, además de una posible privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo de entre 1 y 4 años.
Por la infracción muy grave cometida por el conductor en cuanto a conducir con presencia de drogas en el organismo, esta infracción conlleva una multa de 1.000 euros y la detracción de 6 puntos en el permiso de conducir, si bien, el resultado del test de drogas practicado actualmente se encuentra a la espera de ser verificado por laboratorio autorizado.
Es una preocupación constante de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, la detección de este tipo de usuarios que ponen en grave riesgo no sólo sus propias vidas, sino también las de terceras personas.