El vicepresidente primero, Alejandro Nolasco, y el consejero de Medio Ambiente y Turismo, Manuel Blasco, han asistido este sábado a la XVIII edición de la recreación de la Orden de Santa María de Montegaudio y La Encomienda; en el municipio turolense de Alfambra. Han acompañado al alcalde de Alfambra, José Manuel Monferrer, y a la Junta Directiva de la Asociación Montegaudio. En esta edición, la proclamación del comendador ha recaído en Ramón García Costelló.
Nolasco ha enfatizado que este tipo de actividades sirven para «mantener vivos los pueblos, generar riqueza y luchar contra la despoblación», y a su vez «demuestran el enorme potencial de nuestro territorio». Ha subrayado que esta recreación, que tiene la catalogación de Interés Turístico de Aragón desde 2014, «no tiene techo». Por su parte, Blasco ha recalcado que el sector turístico es «estratégico» para la comunidad autónoma de Aragón.
El origen de esta actividad se remonta al año 1172, fecha en la que Rodrigo Álvarez III, conde de Sarriá, abandonó la Orden de Santiago y creó la Orden de Santa María de Montegaudio con la aprobación del Papa, Alejandro III. Fue una de las órdenes militares más importantes del siglo XII. La Encomienda era el impuesto que garantizaba la protección de la zona por parte de los caballeros de la Orden. Por ese motivo, la recreación incluye la subida al Castillo de Alfambra para simbolizar el pago del tributo.
