Los trabajos están precedidos de una reordenación del ámbito, que se ha distribuido en lotes
Distribución de las parcelas en Torremocha
Mañana miércoles, a partir de las 11, comenzarán las labores de plantación de diversos árboles y arbustos -coníferas (pino carrasco, sabina, enebro), frondosas (encina, quejigo, y arce) además de diversas especies de matorral (endrino, majuelo, rosales)- que permitirán cumplir la petición del Ayuntamiento de Torremocha del Jiloca de establecer una distribución racional y organizada de una zona casi llana de 140 hectáreas de superficie denominada «Labor y Siembra» y que representa, aproximadamente, el 10% del monte de Utilidad Pública nº 41 “Palomera”, con una superficie total de 1.572 hectáreas, que fue roturada en los primeros años del siglo XX.
Todas las plantas proceden del vivero que el Servicio Provincial de Agricultura, ganadería y Medio Ambiente mantiene en la población de Santa Eulalia.
Esta previsto que la plantación se realice en varias jornadas de trabajo. En las dos primeras, a partir de mañana, colaborarán los alumnos del Instituto de Formación Profesional Especifica (IPFE) “San Blas” y, en concreto, a la de mañana está previsto que acudan, el alcalde de la localidad, Feliciano Guillén; el subdelegado del Gobierno en Teruel José María Valero. la directora del Servicio Provincial de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Ana Oliván; la directora del Servicio Provincial de Educación, Cultura y Deporte, Carmen Calvo; el director de IFPE, Jesús Herraiz; y el presidente de la Comarca de Teruel, Joaquín Juste.
El día 24 se celebrara la tercera jornada de plantación con voluntarios y asociaciones de Torremocha a los que esta previsto que se unan los voluntarios de la recientemente creada Asociación Red Impulso Rural del Jiloca. En todas las jornadas se contara con la colaboración de los Agentes para la Protección de la Naturaleza (APNs) para asesorar en la ejecución de las labores de plantación.
Se trata de un ámbito que, fundamentalmente, se dedica al cultivo de cereal de secano. Según Emilio Pérez Aguilar, ingeniero de montes del Servicio Provincial de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente de Teruel,”se pretende optimizar el aprovechamiento y el rendimiento de las fincas. Para ello se va a crear 19 lotes de 3 a 7 hectáreas, lotes dedicados a cultivos y quedarán pendientes de adjudicar otros 8 lotes, que se podrán dedicar a mejora de pastizales para la fauna cinegética, reforestacion o para homogeneizar la superficie de los propios lotes.
Como consecuencia de esta remodelación de las parcelas incluidas dentro del monte se van a establecer una serie de ribazos (ojales), para separación de las fincas, con una anchura variable y que puede oscilar entre los 2 y los 5 metros, así como los correspondientes pasos de ganado e islas de vegetación natural en terrenos no aprovechables para el cultivo, o bien retirados de este, con distintas superficies.
“De esta manera, a la vez de mejorar los recursos naturales del monte y de recuperar superficie forestal, se pretende la conservación de la biodiversidad mediante la creación de pasillos verdes y áreas de nidificación y refugio para la fauna con lo que se verán especialmente favorecidas las especies cinegéticas, la avifauna y pequeños mamíferos”.
Trabajos previos
La plantación es la última de las labores a realizar por parte de los técnicos y de los APNs del Servicio Provincial de Teruel en este proyecto.
En primer lugar se trabajó en el diseño de los lotes del aprovechamiento de labor y siembras para establecer unos lotes homogéneos que perduren en el tiempo y se encuentren diferenciados sobre el terreno y que contribuyan a la mejora, tanto de las condiciones agrológicas como las forestales, con la siguiente distribución final.
En segundo término se trabajó en la eliminación o conservación de ribazos durante la ejecución de los trabajos de redistribución de los lotes. Se pretendió la conservación de aquellos ribazos (ojales) que se encuentren en las zonas con los flujos de escorrentía superficial más dominantes y eliminación de aquellos con pequeñas diferencias de cotas que no contribuyen a disminuir los procesos erosivos:
Los lotes de cultivo estarán delimitados por ribazos y por ello se procederá a su reforestación así como los linderos. Se pretende asimismo la creación de pequeños bosquetes en el monte para crear una red de setos y corredores biológicos en zonas agrícolas de gran extensión, que permita la conexión con manchas forestales y dar alimento, cobijo y refugio a buen número de comunidades faunísticas, dentro de un paisaje general como es el del Valle del Jiloca absolutamente deforestado para su uso agrícola.
Finalmente, se trabajó en la delimitación del perímetro del monte de utilidad mediante la reforestación de sus lindes, que permite una mayor defensa de la propiedad del dominio público forestal.
Una actuación muy similar a la de Torremocha es la que desde hace 20 años se viene realizando en el monte de Utilidad Pública nº 92, situado en Monreal del Campo, que en el año 2014 fue merecedora del Premio Medio Ambiente de Aragón.
