El portavoz de Sanidad del PP recuerda que “todos los españoles deberíamos tener los mismos derechos, y especialmente en un servicio público como la sanidad”
Ricardo Canals, portavoz de Sanidad del Partido Popular en las Cortes de Aragón, afirmó hoy que las contradicciones entre el Gobierno de Aragón y la Generalitat de Cataluña respecto a la prescripción de recetas a desplazados aragoneses en territorio catalán “sólo perjudican a nuestros usuarios” y, en este sentido, reclamó a la consejera de Salud del Ejecutivo aragonés “una reacción contundente en la defensa de nuestros derechos”.
Hace años que el portavoz popular de Sanidad viene denunciando reiteradamente esta circunstancia, que calificó de “discriminatoria”, y que afirmó “no sólo se produce en la época estival y que sufren durante todo el año, algo que la consejera de Salud se ha negado a admitir con vehemencia pese a la contundencia y la realidad de los hechos” afirmó Canals.
Ante la ausencia de una reacción firme por parte del Ejecutivo aragonés ante la Generalitat de Cataluña el diputado popular destacó que “la consejera Noeno está contribuyendo con su desidia a violentar el derecho universal a la prestación del servicio público sanitario, y esa inacción la hace cómplice de la discriminación que actualmente sufren los usuarios aragoneses”.
En esta línea añadió que “el Gobierno de Aragón no puede seguir haciendo oídos sordos ante estos hechos ni andar con paños calientes, porque su obligación y responsabilidad es defender a los usuarios aragoneses que precisan de tratamiento sanitario, estén donde estén”.
Canals recordó también los numerosos convenios de colaboración en materia de Salud firmados durante los últimos años por las dos Administraciones, que a la vista de los resultados calificó de “inoperantes y papel mojado” porque, aseguró, “después de tanta firma y tanto supuesto acuerdo la realidad es que los problemas persisten, se repiten año tras año y además se agravan. Yo me preguntó ¿dónde están los resultados y los beneficios para los usuarios?”.
En este sentido el portavoz popular sugirió que “debería formalizarse algún tipo de acuerdo, en el que interviniese en ministerio de Sanidad junto a las Comunidades Autónomas, para solventar este tipo de conflictos y que los aragoneses no tuvieran que ir con su historia médica debajo del brazo cada vez que salen fuera”.
