- La senadora turolense ha registrado una pregunta en la Cámara Alta para conocer las intenciones del Gobierno de España con relación al incremento del coste del agua provocado por el cierre de la Central Térmica de Andorra
- Tal y como ha denunciado, el final del convenio entre los agricultores y la eléctrica puede suponer un incremento del coste del agua de más del 200%
El final de la actividad en la Térmica de Andorra es un hecho desde el pasado 30 de junio y todavía no existe un Plan de Transición Justa que sirva de esperanza para los trabajadores del carbón en el Bajo Aragón, como tampoco una solución a los regantes del Guadalope que van a sufrir perjuicios muy importantes por el cese del convenio suscrito con Endesa y por el que recibían 1,5 millones de euros en contraprestación por el agua que percibía la instalación para la refrigeración de la Central.
Ante esa realidad, la senadora del Partido Popular de Teruel, Carmen Pobo, ha subrayado que “no pueden esperar más las medidas de apoyo a los regantes del Guadalope”. Es por ello por lo que ha registrado una pregunta en la Cámara Alta para conocer las intenciones que tiene el Gobierno de España con relación al incremento del coste del agua provocado por el cierre de la Central Térmica de Andorra, lo que pone en serio peligro la viabilidad de las explotaciones agrícolas bajoaragonesas y también un buen número de empleos del sector primario en la provincia.
Esta iniciativa se enmarca dentro del conjunto de propuestas que está desarrollando el Partido Popular tanto en las Cortes de Aragón como en el Parlamento nacional para poner solución a este problema. “El tiempo se está acabando y los agricultores siguen sin tener una respuesta de las administraciones para un problema que puede suponer el cese de su actividad y la destrucción de un gran número de puestos de trabajo”, ha advertido la senadora turolense.
Tal y como ha precisado, el convenio que actualmente tienen suscrito los regantes del Guadalope y Endesa-Enel asciende a una cuantía total de 1,5 millones de euros por la concesión de 18 hectómetros cúbicos. El cese de la actividad y, por lo tanto, el fin del citado acuerdo supone que ese importe deba ser asumido por los más de 2.000 agricultores que pertenecen a esa organización, provocando un incremento del coste del agua de más del 204% con relación a los que tienen en la actualidad.
“Si queremos realmente apoyar a los agricultores de la cuenca del Guadalope tiene que terminar la incertidumbre, los gobiernos de Aragón y de España deben ponerse a trabajar para buscar una solución que nosotros venimos reclamando desde hace muchos meses y que se ha demostrado que no está entre las prioridades del Partido Socialista y de todas las formaciones que apoyan a esta formación”, ha subrayado.
“EL SECTOR PRIMARIO ES FUNDAMENTAL”
Pobo ha anunciado que el Partido Popular seguirá instando a los ejecutivos regional y nacional a la adopción de medidas en este asunto y también planteará soluciones al respecto. Todo ello porque, según ha subrayado, “el sector primario es fundamental”.
Para la representante de los ‘populares’ en la provincia, la lucha contra la despoblación “debe contener irremediablemente el apoyo a los sectores estratégicos de Teruel” y entre ellos se encuentra “indudablemente” la agricultura. “Nuestro territorio es conocido nacional e internacionalmente por la calidad de los productos agroalimentarios que se producen y no podemos poner más dificultades a los trabajadores del sector, sino que debemos apoyarles e incentivarles para que sigan siendo un motor de desarrollo y de creación de empleo en nuestros pueblos”, ha complementado.
En ese sentido, ha reclamado al Gobierno de España que “se crea las potencialidades de la provincia” y que “ponga solución a todos los problemas que provoca el cierre de la Central Térmica de Andorra” porque “es uno de las primeras medidas a adoptar para generar oportunidades en el medio rural turolense”.
“Teruel tiene un gran número de características que la convierten en un lugar con enormes posibilidades para emprender, tener éxito y desarrollar un proyecto vital. Pero para ello es necesario un ejecutivo que apueste por el medio rural, que piense en sus necesidades y que plantee soluciones a sus problemas”, ha complementado.
