Cambio drástico de imagen de los ahorradores para vencer por la vía rápida al que será su rival en los cuartos de final de la próxima semana, un Pamesa Teruel Voleibol muy fuerte, teniendo la afición un papel estelar Nada tendrá que ver el sábado que viene, pero eso es lo de menos porque se ha dado la sensación de que se está preparado para las grandes batallas. Mucho en lo anímico se jugaba Unicaja Costa de Almería en la última jornada de la fase regular, siendo el final de una semana muy dura por el cambio en el banquillo. Realmente daba igual el rival que hubiera delante para ese fin, pero está claro que tener a todo un Pamesa Teruel Voleibol era una oportunidad por lo que iba a exigir, y a esto se sumaba el capricho del calendario de hacerlos coincidir justo antes de que ambos vuelven a verse en los cuartos de final.
Será el próximo sábado, de nuevo en el Moisés Ruiz, y después la eliminatoria viajará a Los Planos para quedar decidida. Los verdes tuvieron las bajas de Marco Ferreira y de Paquillo Fernández, y los naranjas la de Mariano Vildósola, pero nada deslució un partido vibrante en el que los de Áxel Mondi levantaron dos bolas de 0-1 para firmar el 28-26 con el que se soltaron de todo los miedos para volar desde el saque en los sets segundo y tercero. Rotos desde el principio, con amplísimas rentas almerienses y con los turolenses haciendo todo lo posible por reengancharse a la lucha, el equipo pidió aliento a la grada.
Los máximos anotadores fueron los dos receptores verdes, el capitán Juanmi González y Víctor Rodríguez, ambos con 13 tantos, quedándose muy cerca el opuesto visitante, un Pernambuco que firmó 12. El bloqueo fue territorio de Moisés Cézar, que hizo cinco entre la igualdad entre ambos equipos, 9 de Unicaja Costa de Almería y 8 para Pamesa Teruel. La gran diferencia se marcó desde el saque, mejor el ahorrador y no solo por los 6 aces, sino por la incidencia en la construcción del ataque visitante, desde el que se cometieron muchos errores. Así, la recepción y el acierto atacante almeriense completaron la misión.
El primer set tuvo como primer dominador a Unicaja Costa de Almería, marcando un 4-2 y un 7-5 que Pamesa Teruel Voleibol anuló para ponerse por delante con un 7-9 en ace de Emilio Ferrández. Juanmi firmó una pipe y un siguiente ataque para devolver de nuevo la igualada. Dos aces de Víctor Rodríguez forzaron el tiempo de Torcello (11-9), efectivo al de nuevo dar su equipo la vuelta a la situación (12-14, igualada verde y 14-16). Fue el mejor momento aragonés, con un 15-18, un 19-22 y un 20-23, pero Andrés Portero entró al saque, hizo un directo y el tanteo se apretó. Con todo, Teruel tuvo dos bolas de set.
Con 22-24 y entrando Bakonji al saque se vieron los problemas de recepción, seguidos de errores de ataque, y Unicaja Costa de Almería tuvo tres bolas de set, haciendo bueno el 28-26 con un ace de Jorge Fernández. Sentó muy bien, y tanto, el triunfo parcial, y se comenzó el segundo set como una apisonadora, pletórico de confianza, mientras que el rival acumuló más errores hasta el 7-2. Asensio hizo un ace para el 10-3 y una finta de Bakonji puso diez de renta (14-4). El central Rubén López entró al saque por parte de un Pamesa Teruel Voleibol que nunca se rinde y que quiso volver a la pelea.
Recortó hasta el 14-9, cortando la racha una pipe de Víctor Rodríguez, y con Bakonji otra vez en el saque se volvió a abrir la brecha (18-10). Los de Torcello siguieron intentándolo y el tanteo se apretó al 19-15 tras el que llegó el tirón final de los ahorradores, con papel principal de Moisés Cézar en la red, firmando los dos últimos puntos para el 25-17. Había que pensar en un tercer set de nuevo igualado, pero de nuevo el inicio fue tremendo, fácil en el juego para un 8-1, tres puntos de Asensio con Juanmi al saque. Tocó repetir remar contra corriente para Pamesa, y controlar para Unicaja, cerrándose el choque con 25-18.
Informa Unicaja Costa de Almería
