Según Miguel Ferrer, el único proyecto que sufrirá retrasos será la piscina cubierta de San Léon
El alcalde de Teruel, Miguel Ferrer, y varios representantes de la Federación de Asociaciones de Vecinos de San Fernando han mantenido una reunión esta mañana en la que los vecinos han manifestado al primer edil su preocupación sobre el funcionamiento ordinario del Ayuntamiento y sobre la continuidad de los proyectos para la ciudad.
En este sentido, el alcalde de Teruel ha reconocido que la única infraestructura que se verá dilatada en el tiempo será la instalación deportiva de San León, “pero el resto de obras seguirán los trámites de obras preceptivos”. Del mimo modo se ha manifestado Isidoro Esteban, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de San Fernando que ha apuntado que “el alcalde ha reconocido la ralentización de las obras de la piscina cubierta de San León, pero ya veremos que ocurrirá cuando llegue el momento de licitar el resto de obras proyectadas puesto que la mayoría están aún en redacción de proyecto de los trabajos”.
Sin embargo, Esteban ha puntualizado que “no es que queramos poner al Ayuntamiento contra las cuerdas, pero hay algunos proyectos, como las conexiones de Capuchinos y la cuesta de los Gitanos, en los que se tienen que expropiar terrenos y somos muy escépticos después de lo que ocurrió con la vía perimetral”.
Plan de Ajuste
Sobre la disposición de financiación que el Ayuntamiento de Teruel del próximo año, Ferrer ha resaltado que “algo que está por ver todavía. Hay comunidades que han manifestado que no van a aplicar los recortes a los ayuntamientos, como por ejemplo, la comunidad de La Rioja. Además, ni el Ministerio de Fomento ni la DGA nos han dicho, aún cuánto tiene que ahorrar el Consistorio de Teruel”.
Asimismo, Ferrer ha destacado que “cuando haya que redactar los presupuestos municipales ya veremos si somos capaces de cubrir el año con los fondos que hay o tenemos que pensar en otra cosa”.
Finalmente, el alcalde de Teruel ha comentado que dentro de las distintas medidas del Plan de Ajuste de Zapatero, lo que “me parece sangrante es que al personal laboral, al que también se le reduce el salario, sea a todos el 5%, mientras que a los funcionarios, para establecer el recorte de su sueldo, se aplica un porcentaje proporcional”.
