El jurado elegido para dirimir los ganadores del XVII Concurso de Literatura Epistolar Amorosa de Calamocha decidió por unanimidad otorgar el primer premio a la obra de Josefina Solano Maldonado titulada “Carta de un payaso a la bailarina muerta”. “Querida Carmen”, de Francisco Corrales Fernández, obtuvo el segundo premio; el accésit a la originalidad recayó en la obra “Acciones legales” de Claudia A. Morales.
El nivel de participación ha sido más alto que en la edición anterior. 158 cartas llegaron el año 2010 y en esta nueva edición han sido 193 los trabajos recibidos en las oficinas de la Sociedad Cultural y Deportiva de Calamocha, organizadora del XVII Concurso de Literatura Epistolar Amorosa de Calamocha. La procedencia, como en ediciones anteriores, ha sido muy variada llegando cartas de todas las comunidades autónomas españolas y de países transoceánicos.
Un año más, la Sociedad Cultural y Deportiva de Calamocha ha fallado los premios de su concurso de Literatura Epistolar Amorosa. Se trata de un certamen totalmente consolidado en la programación cultural del Ayuntamiento de Calamocha ya que, de forma ininterrumpida, se ha llegado a la decimoséptima edición.
Como viene siendo habitual, la participación ha sido numerosa y la procedencia de las cartas variada. Castilla León, Andalucía, País Vasco, Galicia, Cataluña, Madrid, Castilla La Mancha, Asturias, Valencia y, por supuesto, Zaragoza, Huesca y Teruel han sido algunos de los lugares donde se han sellado las cartas. Argentina, Méjico, Alemania, Andorra son también algunos de los lugares de origen de los trabajos llegados hasta la SCD.
El jurado, reunido en sesión vespertina, decidió otorgar el primer premio a la escritora malagueña Josefina Solano Maldonado, de Alhaurín el Grande, autora de la obra “Carta de un payaso a la bailarina muerta”. La obra ganadora plasma con absoluta belleza y delicadeza la grandeza del amor que todo lo hace distinto y mejor. Una verdadera obra literaria donde los recursos ocupan un lugar destacado en la redacción.
El segundo premio recayó en la obra “Querida Carmen”, de Francisco Corrales Fernández, de Tarancón (Cuenca). En esta epístola, el autor narra como el amor entre dos personas puede desaparecer pero difícilmente lo hace el cariño.
Por último, el accésit a la originalidad fue para la argentina Claudia A. Morales con su carta “Acciones legales”. Los títulos de las canciones de Joaquín Sabina son la excusa para mostrar su admiración por su persona.
